
Inclusive Gustavo de Hoyos, exlider nacional de Coparmex, recomendó el texto de Eduardo Caccia por ser una buena forma de «codificar el mensaje» de los empresarios a sus trabajadores
Diario Humano | La Paz, Baja California Sur (BCS).-
Una columna escrita por Eduardo Caccia titulada «Vas, carnal», publicada en el diario Reforma de la Ciudad de México (CDMX) fue blanco de burlas y críticas, al ser considerada clasista.
Entre diversos argumentos como «El presidente» (Andrés Manuel López Obrador) ha espantado el dinero de México», por lo que el autor dice «por eso mi buen, piénsale bien por quién vas a votar».

Luego de que fuera publidada el 23 de mayo y compartida luego por el exlíder de Coparmex, la periodista Laura Sánchez Ley respondió a lo publicado Gustavo de Hoyos, quien celebró el texto.
«Muchos empresarios me han preguntado como hablarles a sus colaboradores acerca de la importancia de su voto en las próximas elecciones. Un buen ejemplo para codificar el mensaje nos lo da @eduardo_caccia. Ustedes saben cual es el mejor conducto», escribió De Hoyos.
«El clasismo de los empresarios o como nos miran: “cámara carnal” “vas hijo” pero además se replican entre sí. De no creerse, nada más lean esta “columna” por eso les digo que ya no deberían existir los columnistas cobran una millonada y escriben cosas cómo está», le respondió Laura Sánchez.
«Y es que sus esclavos, digo, empleados son tan ¡d¡0tas, tan ignorantes, que son incapaces de comprender cualquier otra forma de lenguaje. Ya sólo faltó el uso continuo del «chale» para que los trabajadores pobres descifren el mensaje.
Esto es una oda al clasismo y despotismo», escribió la usuaria Amira Konik.
Aquí la citada columna, original de Reforma:

Hay de parásitos a parásitos, los hay de cuello azul-gris y de cuello blanco. Después de escribir su sesudo y enlazador con el jodido artículo. debió haber sentido una orgásmica satisfacción. «Por fin logré comunicarme con estos «carnales»!. pero estoy seguro que después se fué a presumir éste logro con sus ilustrados amigos, que no se porqué, lo veían con desconfianza creciente. Pero durmió tranquilo esa noche, no tendrá que levantarse a las 4 am como esos fuchi-carnales a los que tan afanosamente desea convencer, «en su lenguaje». Qué me cuentas a mi que sé tu historia, como dijo Juan Gabriel, ahora volteas a ver a esta bola, porque vota y eso pone en peligro tu parasitaria vida. No amigo, se acabaron las becas, se acabaron las mafias académicas, se te acabó la vida. Todavía hay vuelos a la Conchinchina, debias darte una vuelta para allá